La pregunta sobre el origen de los océanos de la Tierra es una de las cuestiones más importantes con respecto a la formación de nuestro planeta y el origen de la vida.
La teoría más popular es que el agua fue traída por impactos de cometas y asteroides.
Los datos del espectometro ROSINA a bordo la nave espacial Rosetta de la Agencia Espacial Europea indican que el agua terrestre no provino de los cometas como el 67P / Churyumov-Gerasimenko.
Los hallazgos fueron publicados hoy en la revista Science.
Los cometas, objetos celestes de hielo con polvo y rocas, bien podrían haber traído el agua a la Tierra, o gran parte de ella, hace miles de millones de años.
Pero la firma química del H2O captada por la nave espacial Rosetta, que acompaña desde agosto al cometa 67P/Churyamov-Gerasimenko, muestra una notable diferencia con la del contenido de los océanos terrestres.
Además, al comparar estos nuevos resultados con datos previos de otros objetos de este tipo, se ve que hay una notable variedad de cometas.